Celsa Group lidera la transformación del sector del acero para hacerlo sostenible

Nuestro plan de descarbonización se vertebra en dos ejes. Primero la reducción de emisiones de alcance 1 mediante la mejora de la eficiencia energética y con la reducción del uso de combustibles fósiles implementando tecnologías y mejoras de proceso para reducir consumos y ser más eficiente en los procesos de combustión; y en segundo lugar reduciendo las emisiones de alcance 2, es decir reduciendo las emisiones indirectas que provienen por ejemplo de la electricidad.

24-03-2023
Juan Carlos Orozco, Chief Strategy and Sustainability Officer (CSSO) de Celsa Group

El sector del acero es responsable de alrededor del 5% de las emisiones de gases de efecto invernadero en la Unión Europea, del 7% en el mundo[1], y es uno de los sectores objetivo del Acuerdo de París. Además, en la Conferencia sobre el Cambio Climático (COP27) celebrada en 2022, los países que representan más del 50% del PIB mundial establecieron una serie de “acciones prioritarias” destinadas a unos sectores específicos, entre ellos el del acero[2]. Por este motivo, este sector es esencial para lograr el objetivo de limitar el aumento de la temperatura del planeta a 2ºC y para no superar los 1,5ºC.

Conscientes del reto que supone el cambio climático para el planeta, CELSA Group tiene el objetivo de reducir sus emisiones de los alcances 1 y 2 en un 50% para 2030, y ser climáticamente neutro en 2050.

Nuestro plan de descarbonización se vertebra pues en dos ejes. Primero la reducción de emisiones de alcance 1 mediante la mejora de la eficiencia energética y con la reducción del uso de combustibles fósiles implementando tecnologías y mejoras de proceso para reducir consumos y ser más eficiente en los procesos de combustión; y en segundo lugar reduciendo las emisiones de alcance 2, es decir reduciendo las emisiones indirectas que provienen por ejemplo de la electricidad.

Para ello trabajamos en mejorar la eficiencia energética y reducir los consumos de electricidad de nuestros procesos y también sustituyendo fuentes de energía convencional por fuentes de energía renovables mediante los acuerdos de compraventa de energía y con la contratación de electricidad con Garantías de Origen renovable.

Innovación para alcanzar la completa descarbonización

Profundizando en nuestra labor por combatir el cambio climático y entre las acciones concretas que estamos llevando a cabo para lograr nuestros objetivos de sostenibilidad, debo decir que la innovación es crucial, y es lo que ha permitido el posicionamiento como líderes en la industria circular y en la descarbonización del sector siderúrgico.

La actividad de obtención de acero mediante horno de arco eléctrico es una actividad intensiva en el uso de energía eléctrica. La gestión eficiente de la energía es pues relevante en las instalaciones de CELSA Group y anualmente se establecen objetivos de mejora relacionados con la mejora de la eficiencia energética. Muchos de ellos tienen el soporte de los programas de innovación desarrollados en el grupo basados principalmente en la optimización de procesos industriales, la monitorización de las variables de los procesos físicos (industria 4.0) y la aplicación del concepto de “machine learning”. 

Durante el pasado año 2022, hemos trabajado una estrategia de sustitución de combustibles fósiles por otras fuentes como el hidrógeno verde, el biometano y otras energías renovables, como la sustitución de materiales alternativos al carbón. Por otro lado, también se trabaja intensamente en aumentar la eficiencia de los procesos y en reducir al mínimo los consumos de gas natural y electricidad.

Todas las mejoras conseguidas en eficiencia energética suponen, además, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero por ser el consumo energético el principal flujo fuente en la emisión de GEI. En relación con el consumo de energía a partir de fuentes renovables, los contratos de suministro de energía eléctrica de las empresas de nuestro grupò están indexados al mercado mayorista OMIE (conocido como pool), por lo que su proporción viene determinada por el mix de generación de las distintas tecnologías de este mercado mayorista.
 
Circularidad

La producción y el consumo de bienes es una causa fundamental de dos de los mayores desafíos que enfrenta el mundo: el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Casi la mitad (45 %) de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) provienen de la forma en que fabricamos y usamos productos y alimentos, y más del 90 % de la pérdida de biodiversidad se debe a la extracción y procesamiento de recursos naturales. (según PACE, Platform for Accelerating the Circular Economy)
 
La circularidad es pues una palanca clave para la lucha contra el cambio climático y la pérdida de  biodiversidad y en este sentido, nuestros objetivos se centran también en avanzar en nuestro compromiso con la circularidad. Para ello apostamos firmemente por la valorización y uso de los residuos que generamos durante nuestro proceso siderúrgico para potenciar la economía circular. La gestión de los residuos no solo nos permite ser más sostenibles, sino que también supone un elemento central de nuestro negocio.

La economía mundial actual es solo un 7,2% circular y, año tras año, los resultados son más negativos, dado el aumento de la extracción y uso de materiales[3].

CELSA Group invierte para aumentar los porcentajes de recuperación y abrir nuevas líneas de negocio vinculadas al reciclaje, al tratamiento de plásticos, y otros metales no férricos o maderas, mediante el uso de técnicas pioneras. En este sentido, desde nuestra compañía avanzamos con la mirada puesta en el objetivo de pasar de ser un 89,4% circulares en 2021, a un 98% en el 2030.
La obtención de acero a través de la fusión de chatarra en hornos de arco eléctricos es uno de los procesos de fabricación más eficientes energética y medioambientalmente. Tal y como reconoce la Comisión Europea en su Comunicación al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, y en el Plan de Acción para una Industria del Acero Competitiva y Sostenible en Europa, del 11 de junio de 2013, con una tonelada de chatarra reciclada se pueden ahorrar más de 1200 kg de mineral de hierro, 7 kg de carbón y 51 kg de caliza.
 
Fabricar acero con chatarra de acero en lugar de mineral virgen reduce en torno a un 75% el consumo de energía y ahorra aproximadamente un 90% del insumo de materias primas. La fabricación a partir de chatarra también reduce enormemente la contaminación atmosférica (en torno a un 86%), el consumo de agua (un 40%), la contaminación del agua (un 76%) y los residuos mineros (un 97%).
 
En Celsa tenemos como proposito: damos vidas infinitas a recursos naturales finitos.


[1] IEA. (2020). Iron and Steel Technology Roadmap
[3] The Circularity Gap Report 2023, página 9

Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Clima